Primer plato primaveral versátil

Ingredientes

Calabacín, 1 pieza

Aderezo:

Tahini, 2 CS

agua caliente, la necesaria para la consistencia que se desee

muggi miso, 1 cc

zumo de jengibre, 2 cm de raíz, opcional

nueces de brasil ó macadamia, puñadito

Topping:

Semillas de sésamo negro, puñadito

Cebollino, tallo y flores, unos 8 tallos

Nueces de brasil o macadamia,, 2 ud x persona

Realización

Se hacen los zoodles o espaguetis de calabacín con ayuda de un “sacapuntas” de verdura o spirelizer. Reservar.

Aderezo:

Se pone en un bol la pasta de tahini y se diluye con el agua caliente suficiente para poder realizar la consistencia adecuada a nuestro gusto. Se añade el miso y se mezcla bien hasta que no hayan grumos. Si se desea añadir el zumo de jengibre que resulte de exprimir unos 2 cm de raíz de jengibre rallada. Los que tengáis mi libro “Dulce, Salud y Emociones” podréis ver el paso a paso en la página 142, apartado de básicos.

Se corta el cebollino con tijeras y se reserva.

Se trocean las nueces y se pasan por la sartén para tostarlas un poquito.

Acabado:

Se coloca el calabacín en una fuente o plato, se riega con el aliño. Se añaden las nueces tostadas por encima junto con el cebollino y sésamo. ¡Estará lista para comer!

En caso de que lo quieras hacer en versión caliente saltea los zoodles de calabacín en un wok con algo de aceite antes de aliñarlos con el aderezo y topping.